inmunidad...por fin llegaste.

lo normal en estos casos es que yo debiera correr, perderme en la multitud, mimetizarme con ella, aprender de ella, usarla y luego desecharla, ahora si me pongo a analizar mi forma de ser, te digo querida que obviamente no lo haré. debilidad? docilidad? tontera? miedo? o simplemente perna?......y con un suspiro de incertidumbre me respondo, todas las anteriores.
te conté qué que el otro día me di cuenta que ya estoy inmune a ciertas enfermedades coquetas, esas que dejan largas marcas en la piel y que cuando llega la cura definitiva te das cuenta que ya te acostumbraste a ella?, en fin, estado normal neutro, sin sensaciones ni maldad.
si, ya sé, mi naturaleza débil y coqueta me hará recaer una y mil veces a ciertas enfermedades, que se transmiten por la mirada, usando los labios como via de contagio. pero te digo mi querida y estimada amiga, compañera de dulces andanzas.....la inmunidad llegó a mi cuerpo.
talvez deba aprender a correr, aprender de ciertas cosas y disfrutar de otras, debo soltar más las amarras de mi cuerpo?.- no, eso ya lo intenté y costó volver a anudar.
no estoy negada a ciertos males, después de todo una licencia no me caeria nada mal....qué? pero como me dices eso?, si ya sé que para contagiarse hay que estar cerca de la via, de eso te hablo, dejaré abierta las defenzas, tomaré resguardo cerca de una cama y tendré los sicotrópicos cerca, después de todo ya estoy inmune a las malditas enfermedades coquetas.
mmmmmmm! y te conté que la enfermedad va mutando?.- si! niña, si hoy la tienes tú mañana al que se la pegues, caerá redondito en otro cuerpo, con más fiebre aún!!....terrible....recuerda enfermedades coquetas, que parten por la mirada usando los labios como via de contagio.